La trata de personas no distingue género, edad, etnicidad o posición socio económica, es una problemática que afecta derechos fundamentales como la vida, la libertad y en especial la dignidad, unos de los delitos más antiguos pero que aún en pleno siglo XXI está al acecho degradando personas con el fin de comercializarlas y explotarlas para obtener ganancias.
La explotación no es solo sexual como muchas veces se considera, el trabajo forzado, mendicidad, matrimonio servil, extracción de órganos y actividad criminal forzada son otras maneras en las que es posible someter a persona, muchas de estas son llevadas con promesas falsas, engaño y manipulación a otra país, un delito que traspasa fronteras convirtiéndose en un problema de índole mundial, sin embargo podemos encontrar estos casos dentro del mismo país, traslado a ciudades o incluso en el mismo lugar de vivienda, casos por ejemplo como niños sometidos a explotación sexual dentro de su lugar de residencia.
Fotografía: Novedades de Tabasco
Ayudar a prevenir y luchar este tema es una tarea de todos, Sebastián Arévalo es joven profesional en Política y Relaciones Internacionales, cofundador y director de la fundación Pasos Libres quien ha decidido a través de esta y otras organizaciones aportar para que este delito no siga creciendo, una de las nuevas modalidades en las que se contactan a las posibles víctimas es a través de redes sociales, el ciberacoso es una de estas formas y Pasos Libres busca generar conciencia frente a la vida digital y al buen uso de estas nuevas alternativas de comunicación.
Generar un autocuidado, identificar escenarios de riesgo, verificar propuestas educativas y laborales con los diferentes entes públicos son unas de las maneras de prevenir la trata de personas como también buscar ayuda en las entidades dispuestas por el estado o a través de la fundación Pasos Libres la cual se encuentra en Facebook: @Fundación Pasos Libres, Instagram y Twitter: FPasos Libres.
Redacción: Julieth Galindo
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